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México, DF., 05 de junio de 2011.- Cumple la Secretaría de Marina con su atribución de salvaguardar la vida humana en la mar, esta vez en Guerrero, Baja California y Quintana Roo durante los días 2 y 3 de junio.

Uno de los rescates ocurrió el día 3 del actual al sur de Cabo San Lucas, donde el personal perteneciente al Sector Naval de Cabo San Lucas, Baja California Sur, acudió a evacuar a un tripulante del buque pesquero “Doña Delfina” mediante embarcación de rescate tipo MLB, con médicos a bordo, que se dirigieron aproximadamente a 70 millas náuticas (126 kilómetros)  al sur de citado cabo para realizar el rescate. Al arribar al punto se efectuó valoración médica del Sr. Raymundo Torres Valenzuela de 38 años de edad, que resultó con lumbalgia postraumática, con estado de salud estable durante su traslado a puerto, donde finalmente fue recibido por paramédicos de una ambulancia de bomberos, quienes lo trasladaron al Instituto Mexicano del Seguro Social para su hospitalización.

Otro rescate se realizó el 2 de junio, en inmediaciones de Playa Norte, de Isla Mujeres, donde acudió personal de la Estación Naval de Búsqueda y Rescate de la Quinta Región Naval, de citada isla, para brindar el apoyo requerido por el velero “Movies”, a bordo del cual estaban dos personas de nombres Jay Scott Berger y Stan Cox, de 33 y 56 años de edad, respectivamente. Una embarcación Defender zarpó al área reportada, donde ubicó al velero con ambos tripulantes de nacionalidad canadiense, sin novedad y cuya embarcación ya era auxiliada por capitanía de puerto. El Sr. Berger solicitó a la Armada de México ser trasladado a Isla Mujeres, para coordinar el salvataje de su velero, por lo que además se le efectuó revisión médica de rutina.

Por último, ese mismo día una embarcación tipo Defender de la Octava Región Naval, en Acapulco, Guerrero, remolcó al velero “Kashi Mashi- II”, de bandera mexicana, en virtud de que se encontraba fondeado en inmediaciones de la bahía de ese puerto por falta de propulsión, al habérsele rasgado sus velas y sufrir daños en su eje propulsor. Bajo esas condiciones, el velero solicitó el auxilio de la Armada de México, que acudió inmediatamente al lugar del evento, remolcando la unidad y sus siete tripulantes al Club de Yates de Acapulco, donde quedaron sanos y salvos.